Libertad de expresión y reserva de la fuente, reflexión del día del Periodista

A propósito de la celebración del día del periodista el pasado 9 de febrero, es importante traer acotación una reflexión que realizó Catalina Botero Marino Decana de la Facultad de Derecho de la Universidad de los Andes, quien afirma que los recientes hechos en los cuales se pone en entredicho la independencia y veracidad de RTVC, abre la ventana a poder reflexionar sobre la verdadera independencia y el derecho a la reserva de la fuente que se debe manejar en todo medio de comunicación ya sea comercial, público o institucional, especialmente aplicando para los dos últimos casos.

Botero Marín,  afirma que el simple hecho de estar dotados de la cualidad de ser un medio público o institucional, no debe ser prenda de garantía para los gobiernos de turno de ser una extensión de algunas oficinas de prensa, por el contrario debe garantizar aún más un amplio panorama de participación en medio de unas normas de respeto y de entendimiento que generen un ambiente de igualdad y de opinión que es respetada y sobre todo tomada en cuenta para los que en su concepto,  también hace parte de una construcción de sociedad.

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El reciente caso con la productora pública, cuyo aparente acto de censura y de violación a la libertad de  expresión, así como el intento de violar el derecho y reserva de la fuente para el ejercicio periodístico, caso que le costó la salida a su último director, es la muestra clara de cómo en este tipo de espacios ha tergiversado la función de estas herramientas que más que orientar de una forma debida a una sociedad, se ha constituido en un canal de fortalecimiento de la imagen del gobierno de turno, dejando de lado la  verdadera finalidad que es la de formar sociedad y no la de servir a un gobierno de turno.

Indica que en medio de este panorama, en el caso RTVC, después de haberse dado la emisión de un programa en el cual varios de sus integrantes alzaron su voz contraria a una de las leyes presentadas recientemente por el presidente Duque, no sólo les fue restringida la retransmisión del programa en un horario que ya había sido estipulado, se sumó que en una visita del Presidente a las instalaciones, no se les permitió entrevistarlo, agregando que al Director de Contenidos digitales, que ya tenía listo un Hastag para quienes en las redes quisieran hacerle preguntas al mandatario, recibió de forma tajante la orden de cambiarlo por otro que a todas luces totalmente contrario al que se había propuesto en su momento.

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El caso no sólo genero molestia, también, más dudas sobre la imparcialidad de quien dirigía la productora al responder ante los cuestionamientos, que muchas de las informaciones eran noticias falsas, lo que generó aún más molestia entre quienes sufrieron este tipo de represión y que tuvieron que ver como sus opiniones eran silenciadas por un sentido de servicio al mandatario.

Dicho panorama pone una sola idea sobre la mesa, quien o quienes son los idóneos para poder dirigir este tipo de medios, y hasta qué punto es totalmente independiente muchas de las políticas del gobierno estatal, para poder garantizar el libre ejercicio periodístico en un servicio a la sociedad que se debe respetar.

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Recalcando finalmente que, “el derecho a la reserva de la fuente, es una garantía que se debe aplicar no solo para proteger un oficio, sino una función protegida por la inmunidad parlamentaria, como lo ha sostenido tanto la Corte Constitucional como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”

“Respetar esta garantía, con total independencia de la filiación política de quien las exija, debería ser un acuerdo social mínimo en una democracia”

Fuente: Diario Ámbito Jurídico