Desde el municipio de Guática, al occidente del departamento de Risaralda, las autoridades tuvieron que trasladar hasta Bogotá a un menor indígena de dos años de edad, perteneciente a la comunidad Embera Chamí, luego de sufrir graves quemaduras en su cuerpo, cuando, al parecer, jugaba cerca a un fogón de leña que se había montado de forma improvisada.
El hecho, que habría ocurrido el pasado mes de enero, obligó a la familia y a los habitantes del resguardo a llevar de inmediato al pequeño al Hospital Santa Ana de la localidad, donde debido a la gravedad de sus heridas, lo remitieron al Hospital San Jorge de Pereira y de allí a la capital del país, donde tuvo que ser intervenido quirúrgicamente dos veces.
Según indicó William Nayasa, Consejero Mayor Indígena de Risaralda, el menor luchó por más de dos semanas por su vida, pero finalmente falleció.
“Dicen que llevaba más de 15 días, más o menos, de esa llevada a Bogotá. Al niño lo llevaron para allá y no resistió, entonces esta semana lo trajeron y lo sepultaron en Guática”, aseguró Nayasa.
La autoridad mayor del CRIR señaló que el menor vivía junto a su familia en la vereda Marmolejo de Guática, municipio donde fue sepultado por sus seres queridos en las últimas horas, después de que les reportaran su muerte el pasado 28 de febrero, pues fue necesario gestionar recursos ante la Alcaldía y la EPS para pagar su traslado.
El niño de tan solo dos años de edad, vivía en el Resguardo Embera Chamí del municipio risaraldense junto a sus dos padres y su hermano menor de seis meses de nacido.
El hecho fue lamentado por los habitantes de Guática y las autoridades del Consejo Regional Indígena de Risaralda (CRIR).