Hasta los minutos finales debió esperar Deportes Tolima para que la pelota entrara al pórtico del Atlético Huila, pero finalmente la jugada se dio, y fue con un pase corto a un lado del recién ingresado Gustavo Ramírez, para que Anderson Plata entrara con un remate potente, derrotara a Banguera el arquero visitante, y se ganara el clásico; pero este es el final, para llegar allí pasaron varios momentos.
El mismo autor del tanto de la victoria buscó la ruta del arco a partir del primer minuto, la progresión fue: balón en la valla exterior, varios duelos personales ganados por rapidez, luego estrelló un remate en el palo y después la pudo embocar a la red, por estas razones fue el destacado del encuentro.
Los argumentos de la visita muy pocos pero en dos remates al menos inquietaron al golero Álvaro Montero que esta vez fue el meta titular de los Pijaos, estas fueron producto de malas salidas o desatenciones, y no tanto creación de juego por parte del Huila.
Planteado el partido con un visitante limitado, y pasado el primer tiempo con ciertas jugadas en área contraria por parte del conjunto de casa, donde no hubo la claridad suficiente, se pasó a una segunda parte con dominio por parte del vino tinto y oro.
Había ingresado Cataño por Juan Pablo Nieto y tampoco se tuvo el enlace esperado, pero si fue mejor la entrega, Guillermo Celis también vio minutos y el medio campo tuvo mejor conducción, las sustituciones continuaron y dos elementos entraron en juego, Omar Albornoz y Gustavo Ortiz, el técnico con esta fórmula que viene aplicando en recientes partidos dio frescura al ataque, renovó lo ofensivo y encontró el premio con el gol del triunfo, que le permite continuidad en la parte alta de las posiciones en liga, y consolidar el optimismo, apoyado en su trabajo para pasar la semifinal de la Copa, en el próximo encuentro ante Deportivo Pereira.