Con el fútbol que enseñó el domingo pasado, se puede pensar que el equipo va a levantar y que ante este mismo rival podría pasar la fase e ir acercándose a la final y la soñada tercera estrella.
La confección de la nómina de una vez, trajo la esperanza de un equipo con mayor potencial para atacar y así lo demostró en los primeros 12 minutos donde llegó 4 veces, 2 con peligro de gol, situación que no se veía en los recientes partidos donde tardaba más de 40 minutos o hasta el segundo tiempo para visitar predios contrarios.
El 1 a 0 llegó con un esfuerzo de un jugador que regresaba a la inicialista y mostró buen nivel, Luis Miranda luchó hasta el final un balón por el sector derecho y su pase al otro costado lo aprovechó Estupiñán que se anticipó a la marca de Angulo y puso el 1 a 0.
El equipo continúo presentando un buen comportamiento en lo ofensivo con Campaz por territorio central y simplificando el pase en el campo contrario.
El Cali del primer tiempo es el rescatable, el que estrelló balón en el palo, puso a trabajar en dos ocasiones a Montero y un retardo de Jhon Vásquez para cabecear un balón que fue colocado para meter el balón.
En menos tiempo, ya que no fue titular Omar Albornoz logró gol que en todos los minutos que le dieron recientemente, un rebote y manda el esférico al arco, toca un jugador del Cali y termina desubicando su arquero para el 2 a 0.
Este marcador ya daba un respiro, pero no podía faltar Jaminton Campaz, en la primera parte dos remates fuera del área, en la segunda parte sin dejar caer el balón en un pase de Ortiz sacó un certero remate que fue el 3 a 0.
Triunfo que hace renacer la esperanza en el equipo pijao que esta semana tiene Copa Suramericana ante Talleres de Córdoba Argentina y el 1 de Mayo va de visita ante Cali para reafirmar su paso a semifinales de la Liga.