Después de terminado el partido entre Unión Magdalena vs Águilas Doradas, el delantero Marco Pérez, le pidió al técnico asistir a la rueda de prensa porque quería expresar la inconformidad que había sucedió dentro del terreno de juego, acotó lo siguiente:
"Hoy estoy muy triste, porque Mejía me dice a mí esclavo y eso es un palabra que aquí en Colombia no podemos usar, la verdad yo estoy muy triste."
Este suceso no es el primero que pasa en el mundo, aunque se realizan diferentes campañas de respeto, es algo que sigue sucediendo y no se sienta un precedente, pues la rueda de prensa siguió como si nada hubiera sucedido, rápidamente el equipo emitió un comunicado de prensa de Águilas Doradas acotó lo siguiente, mostrando rechazo por las expresiones del jugador Mejía:
“En Águilas Doradas a diario propendemos por el respeto, el fútbol en paz y el desarrollo continuo de nuestro balompié, pero acciones como las del señor Mejía, racistas, ofensivas, discriminatorias y segregadoras, no ayudan en nada al fútbol colombiano, por el contrario, se convierten en disparadores para ampliar las brechas que hoy por hoy, como sociedad nos separan”, cierra el comunicado.
De igual manera, también se pronunció el equipo del Unión Magdalena, por medio de un comunicado de prensa firmado por el jugador Alexander Mejía:
"Por mi crianza, mis principios y valores de casa, se me hace imposible denigrar a cualquier persona, aún más con un tema tan delicado como es el racismo, algo que yo padecí inclusive en competencias internacionales, donde he salido a alzar mi voz de rechazo".
"Tengo claro que en cada partido, evento u aparición publica que realicemos, los ojos de la prensa y de todos los aficionados al fútbol estarán en los jugadores, siendo nosotros los actores principales de este espectáculo, por tal razón, pienso que este tipo de comentarios y actos es atentar contra la buena imagen y honra que por más de 19 años de carrera como futbolista me ha costado construir con esfuerzo y dedicación".