Tras un arduo trabajo articulado entre el Alcalde de Acevedo, Gentil Tapiero Buitrago, el gobierno departamental, el Instituto Colombiano de Antropología e Historia, personal de Bomberos Voluntarios y Policía de Turismo, apoyados con maquinaria oruga, se logró la recuperación de una gran roca con petroglifo que había sido removida de su lugar de origen y lanzada al río Suaza por personas inescrupulosas, ocasionando indignación en la comunidad y entes de control por atentar contra este patrimonio ancestral y cultural de esta población del sur del Huila, en donde según historiadores habitaron culturas indígenas como la Andaky, quienes dejaron sus huellas a través de los también llamados grabados rupestres.
La roca fue trasladada hasta la plazoleta de la Alcaldía Municipal para que pueda ser protegida por la comunidad, y se logren conservar las características con las que cuenta como vestigio arqueológico de los antepasados.
Según historiadores acevedunos estos petroglifos están asociados a un calendario indígena representando las 21 lunas y el río Suaza que baña a este municipio. Estos grabados rupestres aún siguen siendo motivo de investigación para dar a conocer su historia a los moradores y turistas.
Por su parte la arqueóloga Rubiela Duarte del Instituto Colombiano de Antropología, junto a un equipo de profesionales en está área, realizaron el acompañamiento para el levantamiento, desplazamiento y reubicación de la roca.
Duarte manifestó que el Huila es un departamento con potencial arqueológico, con gran cantidad de arte rupestre, e hizo el llamado a quienes tengan en sus predios estos petroglifos para que los protejan.
“Es muy importante que no realicen ningún tipo de intervención para resaltar las figuras como el uso de pintura, cepillos, lavado, entre otros, porque aceleran el proceso de deterioro; se debe hacer el reporte ante la secretaría de cultura del Municipio y el instituto para que se emitan las correctas medidas de manejo”, puntualizó la arqueóloga.