Faltaba un cuarto para las siete de la mañana de este domingo, se realizaba la primera eucaristía en la iglesia San Judas Tadeo, ubicada cerca de la Universidad del Tolima, en plena misa sucedió un acto sacrílego, un hombre, al parecer habitante de calle, empieza a vociferar y a decir vulgaridades, hecho que interrumpió abruptamente la celebración religiosa.
El hombre, de aproximadamente 30 años, empezó a avanzar en forma amenazante hacia el altar mientras los feligreses y el sacerdote empezaban a sentirse atemorizados por la situación que generaba esta persona, de repente se percataron que tenía un cuchillo grande y seguía avanzando mientras repetía todo el tiempo; “ante los ojos de Dios voy a matar a dos personas hoy”, amenazando a todos con el cuchillo, haciendo que ya la gente entrara en pánico.
“Uno piensa que podría estar bajo los efectos de la droga o el alcohol, pero parecía que estuviera poseído por alguna fuerza maligna”: dijo a La Cariñosa una de las asistentes a la misa dominical, quien pidió reserva de su identidad.
“En ese momento, el temor se apoderó de todos y empezaron a gritar, sin saber cómo manejar la situación al ver que esta persona aceleraba más el paso hacia el altar muy cerca de nuestro párroco y alcanza a subir tres escalones, ya muy cerca del sacerdote, es ahí cuando varios hombres, sobre todo adultos mayores, sin pensarlo más se abalanzan contra el sujeto, logrando reducirlo y quitarle el arma, además de tomarlo por sus brazos para evitar una tragedia”, relató a La Cariñosa otro de los presentes.
Según las versiones, la comunidad católica de San Judas Tadeo, resaltan que su sacerdote todo el tiempo mantuvo su compostura y no se dejó llevar por el susto que ya era colectivo. Los feligreses afirman que en ningún momento se reflejó el terror en sus ojos, al contrario, se notaba la fe tan grande hacia Dios, sin parar de celebrar la sagrada Eucaristía.
“Ni siquiera en la iglesia podemos estar tranquilos, todos gritaban ¡el padre! ¡ayuden al padre!”. La comunidad manifiesta que no parecía mucho un habitante de calle y no entienden de dónde pudo haber salido este personaje tan aterrador.
“Se veía decidido acabar con la vida del padre y estuvo a pocos pasos de él. Ahora como consecuencia ha quedado el miedo de que quiera regresar”: dicen los habitantes.
Finalmente, luego de ser retenido por la misma comunidad, el hombre se escabulló y salió, aunque estuvo fuera de la iglesia durante unos minutos, “El padre nos tranquilizó y nos pidió que siguiéramos la Misa”, indicó una testigo del hecho.
El hombre se marchó y ante la presencia de la autoridad, el padre Alfonso Bonilla, párroco de San Judas, relató lo sucedido pidiendo que se dejará hasta ahí el hecho para no generar más temor entre la comunidad parroquial.
En Diálogo con La cariñosa el coronel Alex Venegas, comandante operativo de la METIB, afirmó que no hubo reporte a la Policía ni llamado al cuadrante y que ellos se enteraron gracias a este medio de comunicación, que hicieron presencia varios cuadrantes y un oficial para entrevistarse con el Sacerdote y testigos del hecho al igual que poder tener acceso a las cámaras de la iglesia para tratar de identificar a este hombre y darle captura.