Días después de la captura de Gabriel Enrique González, el sujeto de 50 años que asesinó a su hijo, Gabriel Cubillos, en la habitación de un hotel en Melgar, se conoce su testimonio, donde le confesó a los investigadores, la forma en la que llevó a cabo el crimen. Su relato es desgarrador y completamente frío.
En un intento de vengarse de su exesposa, este sujeto le arrebató la vida a su hijo de cinco años, al que llevó engañado al vecino municipio de Melgar, asegurándole que estaban de paseo y que pronto irían a piscina.
“Lo asfixié con la almohada de la habitación y tuve que usar todo el peso de mi cuerpo, porque el niño intentó defenderse”, confesó el sujeto a la justicia, en un relato que conoció y publicó la revista Semana.
El crimen de su propia sangre fue un acto premeditado, que González planeó semanas atrás y que no tuvo reparo en contar, con detalles tan aterradores, que logran asombrar, incluso al más fuerte.
Su versión concuerda con la contada por Consuelo Rodríguez, la mamá del menor, en la que habla de una memoria USB que escondió en el baño de su vivienda.
“En ese video le decía que iba a matar al niño y luego me suicidaría (...) La llamé y le dije que buscara, que le advertí y no hizo caso, ahora ella también sería responsable”, explicó a los investigadores.
También dijo que después de asesinar a su hijo pasó tres horas junto al cuerpo, dando vueltas en la habitación del hotel que había escogido para cometer el atroz asesinato.
“Cuando lo asfixié fui al baño, pero no encontré con qué ahorcarme. Así que tomé 40 pastillas que llevaba en un frasco y que supuestamente eran fulminantes, pero no pasó nada”, agregó el sujeto en su confesión.
Por último, el confeso asesino se mostró sin un ápice de sentimientos, ni buenos ni malos. Simplemente aseguró no sentir "nada".
"No siento nada. Cuando murió mi mamá no sentí nada. Cuando falleció mi papá tampoco (...) Ahora mismo no siento nada", se lee en el testimonio de Gabriel González, revelado por Semana.
El informe de Medicina Legal confirma que el pequeño Gabriel Esteban sufrió una “muerte violenta tipo homicidio”, por la que su padre deberá responder.
De momento, González se encuentra recluido en el búnker de la Fiscalía, bajo rigurosas medidas de seguridad con el fin de evitar cualquier tipo de alteración de orden público, mientras concluye su proceso judicial.