Triste se encuentra una familia cajamarcuna, luego que en un accidente vehicular perdiera la vida un hombre nacido en estas tierras de la despensa agrícola de Colombia y qué encontró el final de sus días en una carretera del Norte de Santander.
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César Hernando Ardila se movilizaba a bordo de un carro en la ruta que conduce de Ábrego hacia Cúcuta, en el sector de Monte Redondo, del Kilómetro 40 más 900 metros cuando una falla mecánica en un vehículo de carga pesada tipo camión que cargaba combustible hizo que el automotor se saliera de control al quedarse sin frenos y colisionara de forma violenta contra otros tres vehículos, entre ellos el automotor donde se movilizaba César Hernando.
Según los reportes preliminares que se conocen acerca de este fatal accidente, el tolimense sobrevivió al choque, sin embargo, no pudo salir de las latas retorcidas, quedando atrapadas en la cabina del rodante donde se movilizaba, muriendo calcinado luego que se presentará un incendio qué fue provocado por el choque anterior.
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César Hernando vivió sus primeros años de vida en Cajamarca, no obstante, desde hace un tiempo su lugar de residencia se encontraba en Boyacá, donde había formado un hogar y donde ahora lo llora una esposa y dos hijas.
Por el momento se espera que se adelanten las labores forenses para que las autoridades hagan entrega del cadáver de este hombre que era conocido con el apodo de “Peluca” y quién se dedicaba a viajar por todo el país manejando tractomula.
Es de recordar que hace pocos días un cajamarcuno también fue noticia luego que Breiner Botero Amaya, residente en el barrio Libertador de Timaná, Huila, donde transmitió a través de un Facebook Live los últimos minutos de su vida, comunicándole a sus contactos en la red social como había tomado la decisión de acabar con su existencia.
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Breiner, al parecer, sostuvo un altercado con sus familiares y en medio de la desesperación, tristeza aburrimiento y estrés la única solución que encontró a sus problemas fue despedirse prematuramente de sus días en la tierra para no volver a respirar el aire de este mundo.