Una niña de dos años murió tras permanecer varios días en la Unidad de Quemados de la clínica Reina Catalina de Barranquilla, luego de que sufriera un accidente en su vivienda en Fonseca, La Guajira, al quemarse con una olla de sopa.
El accidente casero se registró el pasado 11 de diciembre en el barrio José Prudencio Padilla, en Fonseca, momentos en que la madre en un aparente descuido no se percató que la niña había cogido para la cocina donde estaba la olla con el líquido hirviendo, luego escuchó los gritos de la menor, y observó que le había caído la sopa.
De acuerdo con la información de las autoridades, la niña sufrió múltiples quemaduras en su cuerpo que le ocasionaron la muerte.
La menor fue llevada hasta el hospital San Agustín del municipio de Fonseca, pero por la gravedad de las heridas fue trasladada a un centro hospitalario de mayor complejidad en el municipio de San Juan.
Posteriormente, tras una evaluación por partes de especialistas decidieron remitirla hacia la clínica Reina Catalina de Barranquilla, pero 7 días después falleció por las quemaduras en su cuerpo.
El cuerpo de la menor fue llevado a las instalaciones de Medicina Legal de Barranquilla para ser entregados a sus familiares, sin embargo, por no tener los recursos suficientes tuvieron que recurrir a la ayuda de una fundación adscrita a Unicef para hacer el traslado del cadáver de la menor hacia Fonseca para darle cristiana sepultura.
Las autoridades hicieron un llamado a los padres de familia para que estén pendientes de sus hijos, ya que se pueden presentar accidentes fatales en un momento de descuido.