Cerca de 2.000 personas habrían llegado en los últimos días desde la ciudad china de Wuhan, donde se originó el virus.
Las autoridades sanitarias británicas y agentes de inmigración han unido fuerzas para localizar a unas 2.000 personas que llegaron al Reino Unido de Wuhan, la ciudad china donde empezó el brote del nuevo coronavirus, en las últimas dos semanas.
El Ministerio británico de Sanidad confirmó este sábado que las autoridades están buscando "a la mayor cantidad de pasajeros posibles" a fin de establecer su estado de salud.
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El asesor médico de la Sanidad norirlandesa, Michael McBride, dijo a los medios que las autoridades han reclutado a agentes de inmigración para localizar lo antes posible a los pasajeros.
Hasta ahora, no se ha declarado ningún caso de coronavirus en el Reino Unido, pero el Gobierno no ha descartado esa posibilidad aunque ha dejado claro que el riesgo para la población es "bajo".
El asesor médico de la Sanidad en Inglaterra, Chris Whitty, señaló que las pruebas a 14 personas ante la sospecha de que hubieran contraído el coronavirus han dado negativo.
Whitty dijo que hay una "posibilidad" de que se declaren casos en el Reino Unido, tras los de Francia, los primeros en Europa, y los más de 1.200 brotes en China, donde 41 personas han fallecido.
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El Gobierno celebró ayer una reunión de emergencia Cobra, presidida por el ministro de Sanidad, Matt Hancock, y a la que asistieron otros ministros, para evaluar los pasos a seguir.
Las autoridades británicas dispusieron hace unos días la apertura de una zona especial en el aeropuerto londinense de Heathrow por la que deben pasar los pasajeros que lleguen de la ciudad china de Wuhan, donde estalló el brote, como medida de precaución.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los signos de la infección incluyen síntomas respiratorios, fiebre y tos.
