¿Qué representa para Afganistán retroceder 20 años de historia con el Régimen Talibán?
El ascenso del régimen Talibán al gobierno de Afganistán, no solo supone un impacto político, económico y social a nivel mundial, también representa un retroceso en muchos de los derechos qué fueron revalidando con la presencia de las tropas aliadas en este territorio.
La implementación de un sistema democrático sólido y la igualdad de derechos tanto para hombres como para mujeres, son algunas de las características que desde hace dos semanas perdieron sentido y rumbo, con la salida del exilio del Presidente de esta nación y con el regreso del segregacionismo, qué limita el acceso a las mujeres a una vida social donde puedan desenvolverse libremente.
El pasado 31 de agosto no solo salieron las últimas tropas norteamericanas de suelo afgano, también se dejó atrás a una nación, qué dicho las palabras de muchos expertos en materia política internacional, no mostró interés por mantenerse como un estado social de derecho, un país qué con la salida del ejército estadounidense y por demás naciones aliadas, quedo a la deriva y bajo el poder de un grupo armado qué poco a poco toma más confianza para gobernar.
Aunque el resurgimiento de los talibanes se dio sin presentarse mayores confrontaciones armadas y bajo la promesa de estos para no tomar represalias contra los que en su momento apoyaron a las naciones invasoras, muchos ciudadanos conscientes del peligro que representan y el pasado sanguinario que llevan a cuestas, emprendieron el éxodo a países vecinos o se beneficiaron de los vuelos que salieron por cerca de un mes del aeropuerto de Kabul, con destino a suelo europeo o norteamericano.
Una semana después del retiro de las tropas extranjeras, Afganistán exige bajo su nuevo régimen qué las mujeres estudien separadas de los hombres y obliga prácticamente a que ellas, utilicen un velo o el ya conocido burka para tapar sus rostros, se prohíbe la realización de manifestaciones públicas sin previa autorización del régimen, se anuncia la suspensión de los programas de ayuda qué se recibían por parte de organizaciones extranjeras y solamente permanecen oficialmente dos embajadas abiertas en este país, la del gobierno ruso y la del gigante asiático, China.
Este acontecimiento presenta un nuevo orden mundial, en el cual un régimen qué afirma haber dejado la violencia atrás, no es reconocido incluso por varios de sus vecinos, sin embargo se tratan de establecer relaciones diplomáticas, que disminuyan posibles traumatismos en la vida cotidiana de sus nacionales.
Sorprendentemente, parte de este panorama es desconocido para muchos qué solamente se han concentrado analizar el bajón en la popularidad del presidente Joe Biden por retirar las tropas de su país de esta nación y las distintas repercusiones qué se generan en otras latitudes, sin darse cuenta que con esto se menosprecia El salto al pasado en el que quedó este país.