El dólar volvió abrir a la baja, esta vez por debajo de los $4.600, perdiendo $54 respecto a la Tasa Representativa del Mercado (TRM), que se ubicaba en $4.639.
La divisa se cotiza en un precio promedio de $4.569, el mínimo 4.563 y el máximo $4.585. El comportamiento de la divisa se puede ver influenciado por las decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) de una subida de 25 puntos básicos, desde el 4,50% hasta el 4,75 %.
Para algunos analistas, las decisiones de política monetaria que continúen tomando los bancos centrales en el mundo, dependerán del mercado laboral y sus efectos sobre la inflación, lo que impactaría en cierta medida al comportamiento del dólar .
En el caso de Estados Unidos, la inflación marcó máximos en 40 años en Estados Unidos en 2002 y el banco central aplica una política de sostenido incremento de tasas de interés, para aumentar el costo del crédito y contener así el consumo y la inversión, que presionan los precios al alza.
Gracias a esta política sistemática, el mercado inmobiliario y las ventas minoristas muestran signos de debilidad, y el aumento de los salarios comenzó a moderarse.
Entre tanto, la volatilidad de la moneda ha sido protagonista durante el arranque de 2023, pues inició por encima de los 4.800, pero ha estado muy cerca de los 4.500, como sucedió la semana pasada cuando alcanzó un mínimo de $4.504.
El dólar estuvo diez jornadas consecutivas a la baja y luego durante tres días sobrepasó los $4.600, incluso en la jornada del miércoles 1 de febrero logró un máximo de $4.689.
Vale mencionar que la moneda estadunidense ha venido perdiendo terreno con varias monedas en el mundo. "Esto se debe al retorno de la liquidez mundial lo que el mundo ha interpretado como que se estaría llegando al tope de la inflación mundial y con eso el regreso de la certidumbre de invertir en países emergentes", sostuvo Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria.