Sugar Daddy es un término del inglés cuya traducción literal sería ‘papito dulce’, pero más allá del simple idioma hay mucho por saber y entender de este fenómeno. Si bien, en un principio se definía como un hombre dispuesto a pagar por el sostenimiento de una mujer mucho más joven que él, a cambio de recibir favores sexuales.
Antes se creía que solían ser hombres entre 40 y 70 años que tienen una situación económica estable, un hombre con suficiente dinero para poder pagar los caprichos y necesidades de una joven mujer u hombre. Hoy en día ya la edad no importa ni la del Sugar Daddy, tampoco de los Sugar Baby, las cosas a estas alturas de la vida no hay limitantes. Lo que si no ha cambiado es que en muchos casos estos hombres suelen ser casados y con hijos, algo que en ocasiones incluso tienen la misma edad de sus parejas alternas.
Si bien, el tema monetario es parte fundamental, el sexo ya no lo es tanto, muchas mujeres que tienen Sugar Dady cuentan que muchos de ellos simplemente quieren afecto, quien los escuche, por quién preocuparse. Hay mujeres que nunca se han encontrado físicamente con su Sugar, este tipo de relaciones suelen ser vía telefónica, por chat y/o videollamada.
El candente tema pensional
Germán Espejo en un artículo para La Mega nos deja lo siguiente
¿Dónde se consigue un Sugar Daddy y cómo es el contacto?
Hay sitios web especializados en este tipo de contactos que realmente pululan en la internet para que se dé el acercamiento entre el Sugar Daddy y el Sugar Baby.
En estos portales primero los Sugar Daddy expresan sus preferencias y en algunos casos su estado financiero, todo con la intención de convencer a las interesadas de que tienen con que pagar.
Por su parte, las sugar baby suben sus fotos y expresan sus preferencias y lo que requieren para contactar con un sugar daddy, algo que puede ser un monto económico o que se les compre algo específico.
Cuando el daddy y su baby coinciden se ponen en contacto y acuerdan los términos de la negociación.
Los sitios en internet que prestan estos servicios se curan en salud señalando que solo prestan el contacto y no promueven en nada la prostitución.
Tres sitios recomendados y bien calificados
