En los primeros días del mes de junio científicos detectaron una gran nube de polvo desde el Desierto del Sahara que se dirige al continente americano, como ya había sucedido en otras ocasiones.
Según las imágenes, que captó Visible Infrared Imaging Radiometer Suite (VIIRS), se pudo determinar que hay varias columnas de polvo que vienen cruzando el Océano Atlántico y llegará muy pronto al continente americano.
Por medio de un comunicado de la agencia espacial de Estados Unidos, explicó que “los sensores satelitales de la NASA que rastrean la profundidad óptica de los aerosoles observaron aumentos sustanciales en las partículas que reflejan la luz solar sobre la región a partir del 29 de mayo y hasta el 6 de junio. Las imágenes satelitales en color natural del 30 de mayo al 6 de junio también mostraron la progresión de la tormenta a través del agua”.
Por el momento, los científicos no han dicho cuáles serán las ciudades que afectará este fenómeno meteorológico, sin embargo, la NASA indicó que las partículas de este material podrían afectar la salud de algunas personas, principalmente de aquellos quienes sufren enfermedades relacionadas con las vías respiratorias.
Our @NASAEarth EMIT mission will help us better understand how mineral dust clouds affect our climate. Currently, we don’t have a firm answer on whether they're heating or cooling our planet.
"5 Things to Know" before launch: https://t.co/h0PUmQXvOx pic.twitter.com/LfXU74oHV8
— NASA (@NASA) June 4, 2022
También puede traer beneficios, ya que el polvo proveniente de este desierto contiene algunos minerales que brinda fertilizantes naturales para las plantas tanto terrestres como acuáticas.
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) comentó que este polvo tiene un papel importante para la tierra, pues “las partículas en el aire absorben y reflejan la luz solar, alterando la cantidad de energía solar que llega a la superficie, y también pueden promover o reducir la formación de nubes y tormentas, dependiendo de otras condiciones atmosféricas”.
Carolina Urrutia, secretaria de Ambiente de Bogotá, indicó que están siguiendo este fenómeno para tomar medidas al respecto: “los equipos de monitoreo de calidad del aire de la ciudad han empezado a sentir la llegada de ese material particulado que viene precisamente desde África, desde el desierto del Sahara y que arrastra con el material particulado producto de fenómenos meteorológicos y de arenas en ese punto del planeta. No tenemos condiciones que nos hagan preocupar... Desde la Secretaría de Ambiente estaremos en constante monitoreo de las estaciones locales y regionales y le avisaremos a la ciudadanía, en tiempo y forma, en caso de que sea necesario tomar precauciones adicionales".