flores amarillas referencia 2024
17 Sep 2024
07:58 AM
Y a ti ¿Ya te dieron tus flores amarillas? una tradición llena de paz
La importancia de expresar afecto y aprecio, llenando el mundo de color amarillo.
La tradición de regalar flores amarillas el 21 de septiembre es un hermoso ejemplo de cómo la cultura popular puede dar origen a costumbres significativas. Lo que comenzó como una referencia a una canción de una telenovela argentina se ha convertido en una expresión global de amor, esperanza y conexión. La coincidencia con el Día Internacional de la Paz añade una dimensión adicional a esta tradición, vinculando el amor personal con aspiraciones más amplias de armonía y entendimiento.
Cada año, esta tradición recuerda a las personas la importancia de expresar afecto y aprecio, llenando el mundo de color amarillo y alegría, aunque sea por un día. Ya sea que uno participe regalando flores físicas, compartiendo imágenes en redes sociales o simplemente apreciando el significado detrás de la tradición, el 21 de septiembre se ha convertido en un día para celebrar el amor en todas sus formas y aspirar a un mundo más pacífico.
La tradición de regalar flores amarillas el 21 de septiembre: Un símbolo de amor y paz
En los últimos años, una hermosa tradición ha florecido en el mundo hispanohablante: regalar flores amarillas el 21 de septiembre. Esta costumbre, que ha ganado popularidad especialmente entre los jóvenes, tiene sus raíces en una telenovela argentina y se ha convertido en un símbolo de amor, esperanza y conexión. Curiosamente, esta fecha también coincide con el Día Internacional de la Paz, añadiendo un significado adicional a la tradición. En este artículo, exploraremos el origen de esta costumbre, su evolución, las flores más populares para regalar y cómo las redes sociales han impulsado este fenómeno.
El origen: Floricienta y la canción "Flores Amarillas"
La tradición de regalar flores amarillas el 21 de septiembre tiene su origen en la telenovela argentina "Floricienta", protagonizada por Florencia Bertotti. Esta producción, que se emitió originalmente entre 2004 y 2005, cautivó al público con su historia de amor y su banda sonora pegadiza.
La canción clave que dio origen a esta tradición es "Flores Amarillas", interpretada por Florencia Bertotti como parte de la banda sonora de la telenovela. La letra de la canción dice:
Él la estaba esperando con una flor amarilla
Ella lo estaba soñando con la luz en su pupila
Y el amarillo del Sol iluminaba la esquina
Lo sentía tan cercano, lo sentía desde niña
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides que la vida
Casi nunca está dormida
En ese bar tan desierto nos esperaba el encuentro
Ella llegó en limusina amarilla por supuesto
Él se acercó de repente la miro tan de frente
Toda una vida soñada y no pudo decir nada
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides que la vida
Casi nunca está dormida
Flores amarillas
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides que la vida
Casi nunca está dormida
Ella sabía que él sabía
Él sabía, ella sabía
Que él sabía, ella sabía
Y se olvidaron de sus flores amarillas
Estos versos capturaron la imaginación de los fans, quienes comenzaron a asociar el mes de septiembre, y específicamente el 21 de septiembre, con un día para expresar amor y afecto a través de flores amarillas.
Él la estaba esperando con una flor amarilla
Ella lo estaba soñando con la luz en su pupila
Y el amarillo del Sol iluminaba la esquina
Lo sentía tan cercano, lo sentía desde niña
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides que la vida
Casi nunca está dormida
En ese bar tan desierto nos esperaba el encuentro
Ella llegó en limusina amarilla por supuesto
Él se acercó de repente la miro tan de frente
Toda una vida soñada y no pudo decir nada
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides que la vida
Casi nunca está dormida
Flores amarillas
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides que la vida
Casi nunca está dormida
Ella sabía que él sabía
Él sabía, ella sabía
Que él sabía, ella sabía
Y se olvidaron de sus flores amarillas
Estos versos capturaron la imaginación de los fans, quienes comenzaron a asociar el mes de septiembre, y específicamente el 21 de septiembre, con un día para expresar amor y afecto a través de flores amarillas.
La evolución de la tradición
Aunque la telenovela se emitió originalmente en 20042005, la tradición de regalar flores amarillas el 21 de septiembre no se popularizó de inmediato. Fue con el auge de las redes sociales, especialmente en la década de 2010, cuando esta costumbre comenzó a ganar tracción.
Inicialmente, eran principalmente los fans de Floricienta quienes participaban en esta tradición. Sin embargo, con el tiempo, la costumbre se extendió más allá del fandom de la telenovela, convirtiéndose en una expresión general de amor y aprecio. Hoy en día, personas de todas las edades y de diversos países hispanohablantes participan en esta tradición, a menudo sin conocer su origen televisivo.
El Día Internacional de la Paz
Es interesante notar que el 21 de septiembre también es el Día Internacional de la Paz, establecido por las Naciones Unidas en 1981. Esta coincidencia añade una capa adicional de significado a la tradición de las flores amarillas.
El Día Internacional de la Paz se dedica a conmemorar y fortalecer los ideales de paz entre todas las naciones y pueblos. La conexión entre este día y la tradición de las flores amarillas no es oficial, pero muchos participantes ven en esta costumbre una forma de promover no solo el amor personal, sino también la paz y la armonía en un sentido más amplio.
El color amarillo, asociado con la alegría, la esperanza y la amistad, se alinea perfectamente con los ideales de paz y entendimiento mutuo que se celebran en este día. Así, regalar flores amarillas el 21 de septiembre se ha convertido, para algunos, en una forma de expresar tanto amor personal como un deseo de paz mundial.
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Fuente
Alerta Tolima
