Los espacios que fueron habilitados durante este puente festivo para que los comerciantes y emprendedores afectados por el Jamming vendieran sus productos por parte de La Administración Municipal y otras entidades locales, tuvieron un balance positivo debido a que cumplieron con las expectativas que se plantearon desde que inició la jornada.
“Afortunadamente después de ese fracaso del Festival, la Alcaldía y la Gobernación nos ayudaron, porque sin ellos la verdad no hubiera sido posible. El hecho de que nos tendieran la mano fue una bendición y que nos colaboraran a los emprendedores para que pudiéramos vender nuestros productos con éxito”, indicó Jonathan Villamil, emprendedor.
Asimismo la rápida reacción de la Alcaldía de Ibagué, motivó a que los ciudadanos acudieran a los puntos destinados, en los que además hubo actividades alternas de música, deporte y danza para todo tipo de público y donde las intensas lluvias no fueron impedimento para que los ibaguereños se volcaran a las calles a hacer uso de su sentido de pertenencia y como un tema de responsabilidad social, dejaron ver su solidaridad.
“Íbamos para el Jamming con 60.000 empandas, y las vendimos en este gran evento que nos ofreció la Gobernación y la Alcaldía de Ibagué. Un agradecimiento a todos los ibaguereños por la acogida y por este plan choque que han tenido para emprendedores y microempresarios”, aseguró Jeiner Gutiérrez, emprendedor antioqueño.
Es de señalar que, las ventas fueron tan positivas para algunos emprendedores que tuvieron que duplicar la producción para satisfacer a los clientes, y aprovechar la alta afluencia de turistas en la capital de los tolimenses lo que permite evidenciar que la reactivación económica, se mueve a buen ritmo.
“Nosotros teníamos pronosticado vender cerca de 3.000 platos en el Jamming, pero gracias a los ibaguereños superamos la meta. Tuvimos que hacer otros 2.000 e incluso estamos esperando si podemos llevar unas 5.000 empanadas al gran concierto”, concluyó Jonathan Villamil.
De esta manera se conoció un cierre positivo y muchas expectativas para que Ibagué vuelva a ser anfitrión de lo que se llamaría el ‘Ibagué Festival’, donde la ciudad respondió con buena actitud y buenas prácticas comerciales a esta situación.