Graves amenazas reciben campesinos tras continuas denuncias por acueductos en Llano del Combeima
Se han propuesto varias alternativas para dar solución al manejo del conflicto que continúa en Llano del Combeima por ilegalidad en los acueductos. Afectados del sector manifiestan que primero se debe hacer lo posible para que la Secretaria del Medio Ambiente del Municipio, quienes entregaron este servicio a la comunidad, exija que el funcionamiento sea un servicio enfocado solo para los campesinos nativos de la zona.
El objetivo es que los campesinos logren conservar el agua hoy y el próximo 15 años, pero si continua entregando este suministro al desarrollo agroturistico de la hacienda en la entrada de la vereda, no habrá agua cuando empiecen a llenar piscinas y a poblar esta zona con varios problemas en la zona rural.
Cabe resaltar que están a la espera que se pronuncien la Fiscalía, la cual tiene una investigación en curso, también la Personería, quien tiene conocimiento del caso, al igual que el director de Medio Ambiente intervenga.
La comunidad pretende hacer una Asamblea a corto plazo, pero son 154 nativos campesinos y ahora se habla de 292 personas, quiere decir que la comunidad siempre estará en desventaja frente a la mayoría que fue sumada los suscriptores con los usuarios.
Se determinó que la vereda tenía 154 nativos campesinos de la vereda. Son 300 familias en una proyección de 15 años donde, nace la primera problemática entregada el 25 de enero de 2019 por el Secretario de Desarrollo Rural de ese momento. Teniendo en cuenta que el delito es la entrega del acueducto, a un lote ilegal que le pertenece a la comunidad.
De los 154 nativos van 80 suscriptores que se quedan con el acueducto, quienes toman decisiones que no les corresponden y crean una asociación de suscriptores, donde se ven varios apellidos repetidos en los documentos, con un mismo grupo familiar.
De los 300 proyectados a 15 años, se asignaron a 293 personas, quiere decir que a hoy no hay más agua que vender. Cabe resaltar que el contrato fue por aproximadamente $1.300 millones para el acueducto, donde inicia la venta de las haciendas sin agua, perjudicando la comunidad por la venta de muchos lotes, ya que los nativos ubicados en la parte baja, manifiestan que les reclutaron el agua.
Finalmente los habitantes manifiestan que tienen miedo de gastar el agua y que millón y medio cuesta un punto de agua potable, sintiéndose amenazados por los dueños de los lotes, quienes afirman que la empresa de agua potable que crearon, cuenta hasta con oficina con PQR.