Atendiendo la convocaría de la dirección territorial central de la Unidad para las Víctimas, 30 menores entre los 6 y 8 años acudieron con sus padres y/o acudientes para participar de la estrategia de fortalecimiento de derechos Cre-Ser.
Contribuir a la reparación integral del menor y su familia víctima del conflicto, es el objetivo de esta acción dirigida por el área psicocicial, la cual aporta al refuerzo de la autoestima y al reconocimiento de habilidades y recursos emocionales en los niños y niñas, fomentando su empoderamiento como ciudadanos colombianos y sujetos de derechos.
Karen Valencia, madre de Salomé y Nicolás, quien participó en el ejercicio de identificación de cualidades y fortalezas de sus hijos y tras exponer las virtudes sorprendió a los pequeños con un regalo intangible “el regalo que le doy a mis hijos es mi corazón, amor y ante todo mi amistad porque más amigos que yo no van encontrar; yo siempre les digo que tienen mi confianza”, señaló al concluir con amoroso abrazo.
En el mismo ejercicio Liliana Esquivel, mamá de Jhonny, sobre la silueta dibujada de su hijo exaltó las cualidades y fortalezas: “Es un niño que le gusta el fútbol, le gusta divertirse, es muy inteligente, estudioso y amoroso; y el regalo que le entrego es mi amor y mi confianza”, aseguró.
Por su parte Nancy Cedeño Cruz, lideresa de víctimas y quién igualmente hizo parte de las jornadas destacó el encuentro y agradeció al Unidad por permitir la integración no sólo entre padres e hijos sino entre personas que comparte la condición de víctimas pero sobre todo nuevos sueños para sus familias “excelente porque a pesar de que estamos en esta pandemia salieron de esa rutina del encierro. Hoy no hemos divertido y hemos adquirido nuevos conocimiento para llevarlos a nuestras casas y también a nuestras comunidades”, agregó.
Cabe resaltar, que todas estas mediadas hacen parte de la ruta de reparación integral para los menores víctimas del conflicto armado colombiano, quienes igualmente recibirán una carta con el encargo fiduciario que los hace beneficiarios de la reparación económica al cumplir la mayoría de edad.