Representante a la Cámara, Ricardo Ferro
Por: Representante a la Cámara Ricardo Ferro
Hace 20 años un papá estaba tranquilo con el solo hecho de saber en qué sitio estaba su hijo, si en su habitación, en el parque o en el colegio. Hoy en día, con el uso del celular no se puede dimensionar qué tan cerca o tan lejos están nuestros hijos. Como papás pensamos que con el celular el niño se va solamente a entretener y estamos tranquilos porque el contenido que ven es netamente infantil.
Hoy en día la pregunta que se hace un papá es si está más tranquilo con su hijo lejos sin celular o con su hijo al lado, pero con un celular en sus manos.
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De acuerdo con la Regla 3, 6, 9 y 12, desarrollada por Serge Tisseron, director de Investigaciones de la Universidad París Ouest Nanterre, información divulgada por la Asociación Francesa de Pediatría Ambulatoria (AFPA), la edad más adecuada para que los niños tengan en sus manos un celular es partir de los 12 años. Por su parte la Academia Americana de Pediatría y la Sociedad Canadiense de Pediatría establecen que los bebés de 0 a 2 años no deben tener ningún contacto con esta tecnología, de 3 a 5 años restringirlos a una hora por día, y de 6 a 18 años a 2 horas por día. En definitiva: celulares para los menores de 14 años NO.
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Y es que lastimosamente, en internet existen amenazas letales para nuestros hijos. Una de ellas es “Momo” un muñeco horrible que va llevando mediante retos a los niños a que cometan agresiones físicas contra ellos mismos, y además dentro de los primeros retos está no contarle a los papás. Otro peligro es que observando un video normal de dibujos animados, el siguiente que aparece para reproducir es una alteración de sus personajes favoritos convirtiéndolos en malos, violentos y asesinos, finalmente. También existe un dibujo animado muy tierno que les va dando a los menores los pasos de forma fácil y divertida para suicidarse, sí, para suicidarse.
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Muchas veces un papá se ocupa en sus labores y no tiene la fortuna de compartir tiempo con sus hijos. Lo importante es que el espacio que se pueda compartir con ellos sea de calidad, que si están al lado nuestro, estemos seguros que realmente están ahí, escuchándonos, hablándonos, preguntándonos sus dudas a nosotros sus padres y no a un buscador Google o a un dibujo animado de YouTube que puede dar como respuesta las negras intenciones de algunos delincuentes que se esconden en el internet para causarle daño a los inocentes niños.
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Los padres deben estar cerca de sus hijos, mirando el contenido que ven en internet, el celular no es un juguete, no es la solución a calmarlos cuando estamos estresados, es un arma que puede ser letal. Es preferible tener a nuestros hijos lejos, en su habitación, en el parque o en el colegio compartiendo sanamente con otros niños de su edad, a que estén en un celular que los puede llevar más lejos de lo que pensamos.
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