El precandidato a la gobernación del Tolima José Ricardo Orozco, se pronunció sobre los efectos y los alcances tanto positivos o negativos que se tendrán con la mal llamada ley de financiamiento del Gobierno Nacional, aclarando que todo gobierno siempre tendrá como mínimo una reforma tributaria que será bien o mal recibida por los distintos actores de la nación, dependiendo de sus intereses o sus necesidades.
Aunque no negó el rechazo que ha provocado esta iniciativa en toda la población del país, incluido el departamento del Tolima, sí reconoció que en algunos aspectos, la iniciativa tiene sus efectos paulatinamente positivos en favor de las comunidades que se ven afectadas con el aumento de impuestos, indicando que más que aumentar los impuestos, se trata de observar y garantizar que todos los ciudadanos por igual cumplan con el pago de estas obligaciones, que genera de por sí, la captación de recursos que son necesarios para poder adelantar el desarrollo de obras y procesos que llevan beneficios a las personas.
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Al igual que muchos críticos a nivel nacional, cuestionó el hecho de tener que llegar a grabar gran parte de la canasta familia, para poder recuperar cerca de 14 mil billones de pesos de déficit que dejó el anterior gobierno, reiterando que la intención del gobierno Duque es poder en este año, con la avalancha de impuestos, poder recuperar cerca de 8 mil billones de pesos, por lo que afirmó espera esta meta si se pueda llegar a concretar.
El militante del partido Conservador aseguró que la función, sobre el papel permitiría poder darle un mayor movimiento económico al país, pero que solamente en la práctica se podrá saber si esta pretensión es o no posible de conseguir.
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Por su parte el diputado Liberal Jaime Ospina Galindo, indicó que la ley de financiamiento es una iniciativa que deja de lado todo beneficio para la comunidad y se concentra en varios aspectos que ponen en evidencia que su estructuración afecta en mayor parte a los estratos más bajos de la sociedad colombiana, en donde se establece una norma que graba con impuestos cerca del 70% de la canasta familiar, dejan tan solo un 30% fuera de este gravamen.
Aseguró que la discusión sobre la aprobación o no de este modelo de recuperación económica se basa en la discusión de los grandes empresarios de las gaseosas y los demás entes que se verán afectados con estos impuestos y se dejó de lado la lucha por las personas que cada día ganan menos, pero invierten más en el pago de sus obligaciones tributarias.
