Todos los corredores del Tour de Francia se sometieron a un test de detección del covid-19 que dio un resultado negativo para el conjunto del pelotón, anunció este lunes la Unión Ciclista Internacional (UCI).
Los test fueron realizados el domingo por la tarde, un día antes de la jornada de descanso en el departamento de Alta Saboya (oeste de Francia).
Tres corredores se han visto obligados ya a abandonar la carrera desde la salida en Dinamarca.
El francés Geoffrey Bouchard (AG2R Citroën) y el noruego Vegard Stake Laengen (UAE), un compañero del maillot amarillo esloveno Tadej Pogacar, abandonaron el sábado por la mañana antes de la salida de la octava etapa. El francés Guillaume Martin (Cofidis) les imitó al día siguiente por la mañana.
"Todos los corredores que participan en el Tour de Francia fueron sometidos a test la tarde del 10 de julio. Todos los test fueron negativos", oficializó este lunes la UCI.
Pero, como insistió la federación internacional, "las reglas implantadas desde hace dos años en interés de la salud y de la seguridad de todos siguen en vigor. Se trata especialmente de la obligación de llevar mascarilla, de mantener una distancia física suficiente, y de desinfectarse frecuentemente las manos".
Además de los corredores, los miembros de los equipos técnicos de los 22 equipos deben someterse a un test con ocasión del día de descanso.
La nueva ola de covid, que sacude particularmente a Francia, ha provocado ya bajas en el cuerpo técnico y entre el personal de varios equipos. La formación Quick-Step se ha visto obligada a llamar a tres directores deportivos diferentes desde el inicio del Tour.
Antes de la salida desde Copenhague, una media docena de corredores fueron reemplazados en el seno de sus equipos respectivos.