Desde la autoridad ambiental en el Huila la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena, CAM, se hizo un llamado a los alcaldes y huilenses a conocer los escenarios de riesgo, ante la posible ocurrencia de fenómenos naturales como avalanchas, inundaciones y deslizamientos con ocasión de la primera temporada de lluvias del 2022 en el Huila.
"En los estudios de Amenaza, Vulnerabilidad y Riesgo AVR realizados por la entidad se analizó los Fenómenos de Origen Geomorfológico (movimientos en masa) e Hidrológico (Inundaciones y Avenidas Torrenciales) en los sitios más críticos de los municipios de Acevedo, Altamira, Campoalegre, Colombia, Garzón, Guadalupe, Iquira, La Argentina, La Plata, Nátaga, Neiva, Palestina, Pitalito, San Agustín, Teruel y Timaná", dice la CAM en un comunicado.
Asimismo, durante el año 2021 la entidad entregó los riesgos detallados por fenómenos de remoción en masa, inundaciones y avenidas torrenciales a los municipios de Gigante, Hobo, Oporapa, Paicol y El Pital.
Adicionalmente, se avanza en los municipios de Suaza, Isnos, Elías, Tello y Tesalia, para evaluar los niveles de riesgo; para un total de 26 municipios que cuentan con estudios detallados de las principales amenazas naturales que deben afrontar estas poblaciones.
Camilo Augusto Agudelo Perdomo, director de la CAM indicó que “ante la ocurrencia de fenómenos naturales como avalanchas, inundaciones y deslizamientos, ocasionados principalmente por las lluvias atípicas que se están presentando en el departamento del Huila, se hace necesario que las administraciones municipales y comunidades conozcan sus escenarios de riesgo con el fin de tomar las medidas preventivas para salvaguardar la vida de las poblaciones”.
Camilo Agudelo, manifestó que la gestión del riesgo es responsabilidad de todas las instituciones y la población, como lo expresa la ley 1523 de 2012, la CAM viene apoyando a los entes territoriales realizando los estudios necesarios para el conocimiento y la reducción del riesgo; y son las alcaldías y Gobernación los responsables primarios en la implementación de los procesos de gestión del riesgo de desastres.
Los AVR adicionalmente cuentan con el acotamiento de rondas de las fuentes hídricas del área de influencia directa en los sectores y/o sitios críticos. Este instrumento de planificación ambiental y territorial define zonas de protección y usos permitidos con el fin de restringir el desarrollo urbanístico en zonas de riesgo.
En estos estudios técnicos, que son a mayor nivel de detalle, se establecen las comunidades que se encuentran en riesgo no mitigable (que deben reubicarse), las comunidades en riesgo mitigable (que necesitan reducir el riesgo con obras de mitigación) y los diseños y los presupuestos de las obras que deben ejecutarse para reducir el riesgo de la población.
Además, esta información le permite a las administraciones municipales tomar las acciones necesarias para la gestión integral del riesgo de desastre y a las comunidades consultar e identificar los escenarios de riesgo de las zonas críticas ya establecidas; mapas que también pueden ser consultados en la página web de la CAM.