La comunidad alertó sobre un paquete sospechoso que fue dejado en medio de escombros que estaban ubicados en un andén sobre la Avenida La Toma con carrera 12, diagonal al Hospital General de Neiva.
Las autoridades realizaron la verificación en la zona, confirmando que existían ocho cápsulas que contenían pólvoras negras envueltas en bolsas.
Funcionarios del CTI y Policía Nacional realizaron una detonación, de manera controlada, de los explosivos dentro de la zona acordonada.
“Se inició una labor con los técnicos antiexplosivos con la ayuda de un robot para remover el artefacto. Al parecer, no contenía sistemas eléctricos pero sí una sustancia pulverulenta que fue trasladada al laboratorio para ser analizada”, dijo el comandante de Policía Metropolitana de Neiva, Diego Vásquez.
Al parecer, se trata de tubos medianos metálicos de 35 centímetros en los que se contenían las sustancias. Las autoridades adelantan las respectivas verificaciones con las cámaras de seguridad que se encuentran alrededor de la zona, con el fin de hallar pistas que puedan dar con el paradero de los responsables.
Asimismo, la Alcaldía de Neiva ofreció una recompensa para quien entregue información relevante sobre el abandono del paquete explosivo, que presuntamente fue dejado en horas de la madrugada.
En el lugar de los hechos, hizo presencia el director de Fiscalía Seccional, Daniel Parada, quien señaló que Neiva se encuentra en alerta por presencia de grupos armados ilegales que quieren desestabilizar la tranquilidad de los habitantes.
Este hecho de orden público se suma a otro evento ocurrido en menos de una semana en Neiva, luego de que dos hombres encapuchados dejaran colgada una bandera alusiva al ELN, en un puente peatonal ubicado sobre la carrera segunda con calle veintiuna.
Por ahora, las autoridades refuerzan la seguridad en la ciudad dado a la presencia de dos precandidatos presidenciales que hacen presencia dentro del casco urbano.