Menor había sido reclutado hace 7 meses por disidencias de las Farc fue recuperado en La Plata, Huila
En dos operaciones realizadas en el departamento del Huila, el Ejército Nacional logró importantes avances en su lucha contra los grupos armados organizados residuales; el primero de ellos en La Plata, en el que una acción del Grupo Gaula Militar de la Novena Brigada permitió la recuperación de un menor de edad reclutado forzosamente hace siete meses.
Según las autoridades el joven de 15 años había sido reclutado por el grupo armado ‘Hernando González Acosta’, perteneciente al Bloque ‘Isaías Pardo’ del Estado Mayor Central, hace aproximadamente siete meses bajo el control de alias ‘Sebastián’, quien lo utilizaba para llevar a cabo actividades extorsivas dirigidas a empresarios, transportadores, ganaderos y caficultores de la región.
El coronel Jesús Armando Ríos, comandante encargado de la Novena Brigada indicó que “El Gaula Militar Huila, orgánico de la Novena Brigada del Ejército Nacional. Recupera un menor integrante de esa comisión, quien fue reclutado de manera ilegal y en contra de su voluntad”.
De esta manera, el menor había sido obligado a participar en acciones en contra de la Fuerza Pública, en el reclutamiento de otros menores y en la realización de homicidios selectivos en municipios del Huila como La Argentina, Nátaga, Tesalia y El Pital.
“Tras ser recuperado, el menor fue reunido con su familia y entregado a las autoridades de Infancia y Adolescencia para garantizar el restablecimiento de sus derechos y su reintegración a una vida segura y digna”, agregó el coronel.
Por otra parte, en la vía que conecta a Pitalito con el resto del Huila, un hombre identificado como integrante del grupo armado ‘Comandos de Frontera’, perteneciente a la Segunda Marquetalia, se presentó voluntariamente ante las tropas del Batallón de Infantería N.º 27 Magdalena.
“El excombatiente, que ocupaba el rol de reemplazante de escuadra dentro de la estructura ilegal, había operado durante un año en zonas de influencia como San José del Fragua y Curillo, en el departamento del Caquetá”, puntualizó el coronel.
Los soldados lo recibieron y le brindaron el apoyo necesario para iniciar su proceso de desmovilización, destacando que su decisión no solo representa un paso hacia su propio bienestar, sino también un acto de esperanza en el camino hacia la paz en las regiones afectadas por la violencia.
“Estas dos acciones reflejan los esfuerzos del Ejército Nacional para combatir el impacto de los grupos armados en la población civil y fomentar la desmovilización de quienes han sido parte de estas estructuras ilegales”, explicó el coronel.
La recuperación del menor y la desmovilización del excombatiente en Huila son muestras de que es posible avanzar hacia un futuro más seguro y pacífico. Sin embargo, estas acciones también subrayan la necesidad de redoblar esfuerzos para prevenir el reclutamiento forzado, proteger a la niñez y brindar oportunidades de reintegración para quienes deciden dejar atrás la violencia.
Mientras el Ejército Nacional y otras entidades trabajan para garantizar la seguridad y la estabilidad en las regiones afectadas, el compromiso de la sociedad en general será fundamental para consolidar un ambiente donde prevalezca la paz y el respeto por los derechos humanos.
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