Muerte de menor
El menor fue enterrado ayer, domingo, en el totumo
Las autoridades judiciales ya se encuentran investigando la muerte de un menor de edad en la capital musical de Colombia, según sus familiares, hace una semana sufrió un accidente en su casa en el sur de Ibagué, al pisar una puntilla, y por negligencia de los médicos que lo atendieron, dicha herida terminó desembocando en su fallecimiento, algunos días después.
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Los datos que se conocen hasta el momento, el niño de 11 años, identificado como Rodrigo Puerta Leguízamo fue remitido hasta la Unidad de Salud de Ibagué – USI del Sur, donde los galenos lo internaron por los fuertes dolores estomacales y vomito que presentaba, creyendo que se trataba de una apendicitis, cosa que fue descartada al día siguiente.
En lo denunciado por los padres del menor, los médicos en ningún momento le revisaron el pie al niño, a pesar que ellos les comentaron sobre el accidente y que era evidente que el pie y la cara de Rodrigo ya se estaba inflamando.
Contrario a lo que parecería evidente, al menor le suspendieron los antibióticos 32 horas después de ser ingresado al centro médico, puesto que los galenos creyeron que los medicamentos que se le estaban suministrando le habían causado una reacción alérgica.
Luego de eso se ordenó la remisión del menor al Hospital del Líbano, donde lo vería un pediatra, puesto que no había ningún médico especialista en el cuidado de los niños en Ibagué que se pudiera encargar del caso, sin embargo, los padres de Rodrigo le solicitaron ayuda al concejal Juan Ávila, y por medio de él lograron recibir al menor en el Federico Lleras Acosta.
Pese a esto, la situación no mejoró, Rodrigo estuvo varias horas sin atención, e inclusive su familia denunció que el niño se cayó de la camilla, pues no estaba en las mejores condiciones.
Luego de esto al menor le practicaron múltiples exámenes que parecían poco concluyentes, y a pesar de toda la inflamación seguía avanzando por su pierna, solo hasta el jueves de la semana anterior un infectólogo que lo revisó dictaminó que Rodrigo tenía una infección alta, y le ordenó mas análisis de laboratorio.
Pocas horas después de eso, Rodrigo sufrió un preinfarto y tuvo que ser internado en la UCI, donde otra pediatra tomó el caso y el niño paso al quirófano, puesto que se descubrió que tenía un edema y debían intervenirle quirúrgicamente la pierna al niño para evitar que siguiera avanzando.
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Lamentablemente, en medio de la operación el niño no resistió y, a pesar del esfuerzo de los médicos por evitar un desenlace fatal, Rodrigo murió pocos minutos después.
Las incontables inconsistencias en la atención de Rodrigo Puerta, su familia ya interpuso una denuncia ante la Fiscalía por el delito de homicidio culposo y negligencia por parte de los médicos, hecho que ya es investigado por las autoridades judiciales y la Secretaría de Salud Municipal, esperando que las pesquisas dictaminen las conductas detrás del accionar de los médicos que atendieron al niño.
