Sujeto cometió vejámenes contra su hijastra delante de su propia hija

Ante el juez octavo con función de control de garantías fue llevado Luis Adalber Issa González, quien tenía una orden de captura en su contra por delito sexual cometido en contra de su hijastra menor de edad, en el cual fueron perpetrados en dos viviendas en el que convivía con su ex pareja sentimental y las dos niñas en la vereda La Coqueta, zona rural de Ibagué, donde ejecutó toda clase de vejámenes en presencia de su hija biológica, también menor.

Según la Fiscal 55 del Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (CAIVAS), desde noviembre del año 2016 hasta el 4 de mayo del presente año, el sujeto venía abusando sexualmente de su hijastra cuando tenía 9 años de edad. La hija del capturado era la persona que observó cómo se la llevaba hacia otra habitación o sabía de la situación porque su hermanastra le contaba. En entrevista ante la Fiscalía, las menores de edad narraron de manera detallada lo sufrido por parte del individuo.

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De modo que, la Fiscal le imputó el delito de actos sexuales con menor de 14 años agravado en concurso homogéneo y sucesivo, como quiera que cometió toda clase de vejámenes contra la menor víctima, le realizaba tocamientos por encima y debajo de la ropa, además en múltiples ocasiones abusó sexualmente de ella obligándola a practicarle sexo oral, entre otras situaciones en las que degradó a la niña.

Entretanto, la hija que fue testigo directa y presencial de los hechos, nunca fue abusada por su padre, pero sí se dio cuenta de la situación con la hijastra, en el cual el señor les decía que se quedarían solas si contaban algo. La madre nunca sospechó, ya que todo sucedió mientras ella iba a estudiar y asistir a clases en la universidad, además le tenía confianza al sujeto, ya que lo distinguía desde la infancia.

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Las niñas finalmente confesaron cuando la madre comenzó a sospechar de la situación y les pidió ser sinceras con ella, ya que se rehusaban a decir algo. Finalmente, la víctima contó todo a través de una sentida carta y la otra niña lo confirmó. En audiencia, el abusador no aceptó ser responsable y se determinó por parte del juez darle medida de aseguramiento intramural.