En escena del crimen del médico Edwin Arrieta hallaron más de $300 millones
El caso de Edwin Arrieta, médico colombiano asesinado por el español Daniel Sancho, mientras se encontraba de vacaciones por Tailandia, ha conmocionado al país. El esclarecimiento de los hechos se encuentra en investigación y hace poco las autoridades encontraron al rededor de 80.000 dólares (lo que serían unos $319.460.000 pesos colombianos) en la escena del crimen. Esto sumado a otros objetos de valor como cadenas de oro.
Darling Arrieta, hermana del colombiano, explicó que él tenía todo ese dinero porque tenía intención de conseguir la última tecnología que le sirviera para su profesión, cirujano plástico, especialmente para intervenciones faciales.
Por su parte, Sancho, de 29 años, confesó que sí había cometido el crimen. Este jueves 1o de agosto, la familia del joven que descuartizó el cuerpo del médico colombiano expresó que lamenta lo ocurrido, en un comunicado compartido a través de su abogado.
"Sentimos mucho el fallecimiento de Edwin y acompañamos en el sentimiento a su familia”, leyó el abogado Fernando Oca en un video.
Las autoridades lo acusan de asesinato premeditado, crimen castigado con la pena capital en ese país.
El caso ha provocado ríos de tinta en España. Daniel es hijo del conocido actor Rodolfo Sancho y nieto de otro intérprete español muy popular, Sancho Gracia, ya fallecido.
Un abogado de la familia del médico colombiano dijo a la AFP que no buscan la pena de muerte para Sancho.
"Definitivamente no queremos acceder a la pena de muerte porque la familia es muy religiosa (católica), muy creyente en Dios", indicó a la AFP Miguel González, apoderado legal de los familiares de Arrieta
"Sí queremos una pena ejemplar, puede ser incluso la cadena perpetua", agregó González, quien rechazó una eventual extradición de Sancho a España, dado que ambos países tienen un convenio que lo permitiría una vez haya sido condenado.
Imágenes de cámaras de videovigilancia obtenidas por la policía muestran a Sancho y Arrieta juntos en una motocicleta en la isla turística de Koh Pha Ngan, antes de que se encontraran los restos del colombiano.
La policía tailandesa dijo que los motivos del asesinato no estaban claros.