El Sector Constructor en Colombia: Retos y oportunidades para la reactivación

Situación actual del sector

A pesar de que Colombia registró un crecimiento económico del 1,7% en 2024, el sector edificador continúa experimentando una recesión técnica, evidenciada por seis trimestres consecutivos de contracción en su valor agregado. El año pasado cerró con indicadores negativos, incluyendo una disminución en las iniciaciones de vivienda nueva superior al 14%, lo que ha tenido un impacto directo en el empleo, con una pérdida promedio de 23,000 puestos de trabajo mensuales, principalmente entre obreros y oficiales de construcción.

Las perspectivas para 2025 no son más alentadoras en el corto plazo. La falta de anuncios concretos para la reactivación del sector, junto con la suspensión de la preasignación de subsidios y la incertidumbre en la operación del programa "Mi Casa Ya", han provocado una caída significativa en los indicadores clave del mercado en enero: los lanzamientos disminuyeron un 30,5%, las ventas se redujeron un 11,9% y las iniciaciones cayeron un 55,2%.

Señales positivas para la recuperación

No obstante, existen señales alentadoras que apuntan hacia una posible recuperación del sector. Entre estas destacan:

1. El "Pacto por el Crédito" ha generado un incremento del 50% en los desembolsos para adquisición, leasing y construcción de vivienda individual. Entre septiembre de 2024 y enero de 2025, el promedio mensual alcanzó los $2,64 billones, impulsando un aumento del 31,5% en la entrega de viviendas.
2. La internacionalización de la vivienda se ha convertido en un factor dinamizador, con un 7,3% de las viviendas vendidas adquiridas por compradores internacionales, principalmente en Quindío, Magdalena y Antioquia.
3. Las tasas de interés se encuentran en niveles inferiores a los observados en 2023, facilitando el acceso al crédito.

Oportunidades regionales y perspectivas futuras

El potencial de las regiones juega un papel fundamental en la estrategia de reactivación. Actualmente, los planes de desarrollo de 8 departamentos y 17 municipios incluyen una inversión de $2,3 billones destinados a subsidios de vivienda, con el objetivo de financiar 125,000 unidades habitacionales.

El departamento del Tolima, específicamente, finalizó el 2024 con indicadores positivos en comparación con el promedio nacional: el número de viviendas aumentó un 11,8%, las iniciaciones crecieron un 67,2% y los lanzamientos se incrementaron un 23,9% frente al 2023. En la región hay actualmente 27,471 viviendas en preventa o construcción, con un valor total de $5 billones y 1,887,042 metros cuadrados, distribuidos en 81 proyectos desarrollados por 34 constructoras.

En cuanto a las perspectivas a mediano y largo plazo, se proyecta la formación de 4,1 millones de hogares hasta 2035, lo que representa una gran oportunidad para el mercado formal de vivienda. Adicionalmente, se estima una demanda de 12 millones de metros cuadrados en proyectos no residenciales para 2030, con Bogotá liderando el desarrollo de oficinas y espacios comerciales.

Según Guillermo Herrera, a pesar de la difícil coyuntura actual, el sector constructor en Colombia está preparado para reactivarse y aprovechar las oportunidades que surgirán después de 2026. Para garantizar un crecimiento sostenible y su contribución al desarrollo económico del país, será fundamental contar con claridad en la política de vivienda, implementar una estrategia de reactivación efectiva desde las regiones y capitalizar las oportunidades macroeconómicas y sociodemográficas que se presentan en el horizonte.

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