Niños de Ambalá reciben bicicletas para llegar a la escuela sin largas caminatas

Durante años, 14 niños de la escuela rural Andrés López de Galarza, en la vereda Ambalá, emprendieron un arduo recorrido de más de dos horas diarias para asistir a clases. Caminaban por montañas, riachuelos y caminos de tierra, enfrentando el frío de la madrugada y el fuerte sol del mediodía. Sin embargo, su realidad cambió gracias a una iniciativa liderada por la Policía Metropolitana de Ibagué y ciudadanos solidarios, quienes les entregaron bicicletas para facilitar su trayecto escolar.

Un hallazgo que impulsó la solidaridad

La historia comenzó en enero, cuando uniformados de la Policía realizaban un patrullaje por la zona rural de Ibagué y llegaron hasta la escuela de la vereda Ambalá. Al ingresar, fueron recibidos por la profesora Paola y un grupo de pequeños estudiantes, quienes les compartieron las dificultades que enfrentaban para asistir a clases.

Los uniformados conocieron de primera mano las largas caminatas de los niños, quienes, a pesar del cansancio, nunca faltaban a la escuela. Conmovidos por su esfuerzo y ganas de aprender, los policías decidieron actuar y buscar una solución.

El camino hacia un sueño sobre ruedas

La meta era conseguir 14 bicicletas, una para cada niño. Durante dos meses, los policías gestionaron donaciones con la comunidad y lograron reunir bicicletas usadas que necesitaban mantenimiento. Fue entonces cuando la bicicletería "Full Bike Sport" se sumó a la causa, reparando y acondicionando cada bicicleta para que los pequeños pudieran usarlas sin problemas.

Además, se organizaron jornadas de embellecimiento en la escuela, con apoyo de otras entidades, pintando la fachada y adecuando los espacios para hacer de esta entrega un evento inolvidable.

Un día de fiesta y nuevas oportunidades

El pasado 28 de febrero, la emoción se apoderó de la vereda. Con música de la orquesta de la Policía y presentaciones del Policirco, los niños celebraron un día que quedará en su memoria. Entre sonrisas y aplausos, los pequeños recibieron sus bicicletas, completamente renovadas y listas para recorrer los caminos de la vereda.

"Ahora podré llegar más rápido a la escuela y no me cansaré tanto", expresó emocionado Davison Hernández, el mayor de los estudiantes beneficiados.

Las bicicletas no solo representan un medio de transporte, sino una oportunidad para que estos niños tengan más energía y tiempo para dedicarse a sus estudios. Con esta iniciativa, la Policía Metropolitana de Ibagué reafirma su compromiso con la educación y el bienestar de las comunidades rurales, demostrando que un pequeño gesto puede transformar vidas.