El departamento entra a un proceso de pre matrícula para iniciar a consolidar todos los datos de la vigencia de 2023, donde se realizan las convocatorias y algunos cambios para instituciones educativas de otros municipios del Tolima.
"La matrícula se sostiene hasta el mes de noviembre y diciembre, en ese sentido tendremos cifras exactas de deserción escolar finalizando octubre", afirmó William Polo, presidente de Simatol.
Según el presidente, las entidades territoriales fueron comprometidas en obligaciones que antes no tenían y ahora tendrán que rebuscar los dineros, adicional al tema de la corrupción y falta de planificación en la contratación del PAE y transporte escolar.
"Nos preocupa, debemos hacer de tripas corazones y los docentes haremos lo posible con la creatividad para que los niños se mantengan", expresó William Polo.
Como un estado de alerta para el próximo año se han catalogado la deserción escolar, donde se busca que, a partir del nuevo gobierno de Gustavo Petro fortalezca el proceso educativo y genere en definitiva una paz total en este sector que tanto lo requiere.
Cuando no se tiene la matrícula completa, lastimosamente se maneja desde hora extras, donde se autoriza a los rectores que suplan los docentes que aún no se contratan.
Es importante señalar que, en el mes de marzo habían más de 142 mil niños matriculados, donde hacían falta más de 7 mil matriculados a comparación del año anterior, situación que se ve reflejada en la falta de contratación de docentes.
Municipios entre el 5 % y 10% de matrícula que permanecen en alerta alta: Alpujarra, Cunday, Dolores, Icononzo, Lérida, Líbano, Murillo, Natagaima, Ortega y Palocabildo.
Finalmente, se conoce que la secretaría de Educación el año pasado arrancó el proceso de matrícula desde noviembre porque tenían claro las dificultades que se iban a tener al regresar a la presencialidad y sumando ahora la ola invernal.