Ricardo Ferro
Ricardo Ferro Representante a la cámara por el Tolima del partido Centro Democrático.
Como muchos saben, fui futbolista antes de dedicar mi vida a lo público. Jugué con Falcao en el equipo Lanceros Boyacá en el año 2000, una época en la que las batallas de las mujeres para se les reconociera su papel en la sociedad profesional eran mínimas y poco prevalentes, por no decir nulas.
Hoy en día, más conscientes de la necesidad de equiparar los espacios laborales, en muchos casos se nos olvidó el deporte, supremamente relevante, pues no solo es una actividad física, sino que construye sociedad e identidad nacional, transmite valores y principios a niños y jóvenes y los aísla de la criminalidad y los malos pasos, y es un trabajo, como cualquier otro. No obstante, en su ejercicio profesional, el papel de las mujeres se ha visto opacado fuertemente.
Muy a pesar de que algunas de ellas, como Caterine Ibargüen, Mariana Pajón y María Isabel Urrutia, han logrado superar las barreras de entrada y no solo se han mantenido sino que han logrado triunfar, las brechas siguen siendo muy grandes y no solo están presentes en el sector privado en materia salarial y de presencia mediática, sino también en los recursos que pone el Estado para fomentar y apoyar el deporte.
Si bien el Ministerio del Deporte viene realizando grandes esfuerzos por resaltar y apoyar a través de diferentes programas deportivos a las mujeres desde muy pequeñas, también se reconoce que faltan muchos retos por superar, entre ellos las garantías que se le da a una mujer para reincorporarse después de su etapa de maternidad, o mantener el patrocinio de aquellas marcas que representan el deporte femenino, entre otros.
Lea También:
¡Encerrados y Desempleados!
Por esta razón, y buscando cumplir mi promesa de ser el representante de los deportistas en el Congreso de la República, radiqué a finales del año pasado un proyecto que busca que los recursos del Estado que sean para el deporte se distribuyan de manera equitativa entre hombres y mujeres. Es importante aclarar, que eso no significa que la mitad de los recursos se vayan para los deportistas y la mitad para las deportistas; sino que, por ejemplo, si hay un equipo femenino de fútbol en Ibagué, reciba los mismos recursos que el equipo masculino, en función del número de integrantes, pero nunca alguna deportista se quede sin lo necesario.
Lo que más me impulsó a sacar este proyecto adelante fue el testimonio que me dio Ingrit Valencia, atleta, boxeadora y medallista olímpica, quien me contaba que, en sus inicios como boxeadora, cuando se distribuían los suplementos dietarios en apoyo a deportistas, con recursos del Estado, se discriminaba a las mujeres que ejercían esta actividad y aún dando los mismos resultados, solo se entregaban a los hombres. Si llegaba a sobrar algo, ahí sí tenían, y eso que unas pocas de ellas, acceso a estos.
Para sacar adelante este proyecto tan relevante, quise contar con la participación de mujeres congresistas de todos los partidos políticos, y claramente, contando con el acompañamiento del ministro del deporte, Ernesto Lucena, quienes reforzaron la importancia del proyecto para la mujer.
Lea También:
¡Justicia!
Este martes, en la plenaria de Cámara de Representantes, fue aprobado el segundo de cuatro debates que tiene que surtir este proyecto de ley, que ayudará a fortalecer e impulsar la participación de mujeres en las diferentes disciplinas deportivas en el país, consolidando el deporte femenino como una potencia mundial, y aprovechando la calidad de nuestras deportistas, que son grandes luchadoras.
Pero esto no es todo, sino es a penas el comienzo de la reivindicación de esa lucha de tantas mujeres atletas que necesitan recursos para poder sacar adelante sus carreras, las cuales todavía tienen la dificultad para aquellas que deciden también cumplir con el sueño de ser mamá, en una vida productiva que suele ser más corta que cualquier otro oficio o labor, y en la que sus oportunidades de obtener una pensión son mínimas.
El deporte es el lenguaje universal de las naciones, que nos une, y mientras no logremos equiparar las oportunidades y dejar atrás la discriminación en razón de estereotipos que se han logrado demostrar que no son ciertos, nunca cumplirá a cabalidad su función en la sociedad. Hasta entonces, será este el que nos ayude efectivamente a transformar las realidades de muchos territorios afectados por la violencia y la criminalidad, y con este proyecto convertido en ley, otorgándole seguridad y confianza a las mujeres de que ellas serán las referentes del deporte profesional a partir de ahora.
La información publicada por los columnistas así como su opinión, posición política y apreciaciones en los temas que trata son de su absoluta responsabilidad y no comprometen de manera alguna AlertaTolima.com o a RCN Radio en General.
Fuente
Alerta Tolima
