Más de 200 personas de los barrios La Unión y Miramar, se reunieron el pasado sábado para llamar la atención del Alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo y el gerente del Ibal Alberto Girón, para que respondan por lo que ha sido uno obligación del estado y que por falencias en el aparato administrativo están supliendo en su mejor forma los acueducto complementarios de la ciudad.
Luis Eduardo Usique, habitante del barrio habitante La Unión, indicó que una de las obligaciones del Alcalde, como promesa de campaña y por mandamiento de ley, es entregar el tanque de tratamiento de agua potable ubicado en la zona sur de la ciudad y que con los planes de bombear agua al Ibal en el barrio La Paola, dejaría de lado esta opción para los más de 100 mil habitantes de la zona sur de la capital del Tolima.
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Miriam Tapias, otra de las habitantes del barrio La Unión, indicó que el Alcalde debe dejar de lado su corazón de piedra, porque los más perjudicados con las falencias de este servicio son los menores de edad de las familias que habitan en las comunas 11, 12 y 13 de esta capital, petición a la que se suman Efraín Mata, José Triana, Mercy Bermúdez, el maestro Teleterio y Yesid Espejo, quienes esperan una pronta respuesta de parte de la administración municipal
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De otra parte en el barrio Miramar, su presidente de Junta de Acción Comunal Luis Alarcón, indicó que a la fecha el acueducto de este barrio presta servicio a 300 familias, algo más de 2 mil personas que se ven perjudicadas por el servicio irregular.
Desde la Comisión Empresarial de la Junta de Acción Comunal de Miramar rechazó la solicitud del Alcalde a la Superservicios, para que ésta intervenga los acueductos, resaltando que es un acto bastante delicado, teniendo en cuenta que estas organizaciones, cumplen una labor que debería ser bandera de la administración local y que las falencias que se presentan son por la falta de apoyo del mismo.
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Adicionalmente, líderes como Felipe Novia afirmó que los barrios del sur no pueden ser la cenicienta de la ciudad y recordó que varios proyectos de vivienda que se han construido allí, están sin poderse entregar debido a la falta de agua para ser usada en estos espacios.
Otra de las peticiones vino de parte de Fabián Camacho, Gerente de la Ibaguereña y quien solicitó al Alcalde además intervenir el alcantarillado de la zona, ya que el actual está en avanzado estado de deterioro, por cerca de 20 años, luego de haber sido puesto al servicio en la Alcaldía de Álvaro Ramírez.
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Finalmente este llamado se han sumado los concejales como Humberto Quintero y Pedro Mora, coincidieron en afirmar que la administración local ha evadido su responsabilidad en prestar un buen servicio de agua para los barrios del sur, que los cambio en el proyecto de acueducto alterno sólo demoran más el proceso de la prestación del servicio e implica el aumento presupuestal para montar una estructura que sirva para llevar el agua hasta la planta de la Pola y de allí poderla devolver a los usuarios de los barrios del sur.
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