Entregan cuerpo de victima de 'Falsos Positivos', "Juan Carlos Aguirre no era guerrillero"- JEP
Recuperan y entregan cuerpo de Juan Carlos Aguirre Macías, víctima de falsos positivos que había sido doblemente desaparecido en Huila. El cuerpo fue recuperado en febrero de 2024, durante la primera intervención que hizo la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) en el Cementerio Central de Neiva.
Luego de 16 años de búsqueda y lucha de parte de la familia Aguirre Macías, se hizo oficial por medio de una ceremonia en el cementerio central de Neiva, la entrega del cuerpo de Juan Carlos, dando como finalizado el tormentoso y duro camino que atravesaron por tratar de hallar y reivindicar la memoria y nombre de su ser querido.
Raúl Eduardo Sánchez Sánchez, presidente de la sección de ausencia y reconocimiento de la JEP, indicó que “es un momento muy emotivo, bastante fuerte para todos nosotros en la medida que hemos logrado identificar a una de las víctimas del conflicto armado dentro de los llamados ‘Falsos Positivos’ en desarrollo de la medida cautelar que se está tramitando en el cementerio central de Neiva”.
El hallazgo se dio en el marco del trabajo conjunto de la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD), la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses en esta región del país; en ese sentido la familia de Juan Carlos Aguirre Macías ya tiene certeza de dónde encontrar a su ser querido.
“Con esta entrega digna a sus familiares, podrán cerrar de una vez ese dolor, y con esos actos, la JEP, en contribución de la UBPD y el Instituto Nacional de Medicina Legal, estamos dando pasos para la verdad, la reconciliación y la sanación de todas las heridas derivadas de este conflicto armado”, agregó el magistrado.
La búsqueda
La búsqueda de Juan Carlos, fue liderada por su hermano Mauricio, y su mamá, Gladys Macías desde el 2008, cuando a sus 41 años, fuera dado como desaparecido en el municipio de Íquira, Huila, luego que un primero de febrero, saliera de su casa en el barrio Santa Inés, al norte de Neiva y no se volviera a saber nada de su paradero.
De esta manera, cuatro años después de su desaparición, en el 2012, su familia se enteró mientras escuchaban una reconocida emisora regional, que debían reclamar el cuerpo de su ser querido en la Fiscalía en Neiva; a partir de ese momento inició el tormentoso camino por conocer la verdad de lo sucedido con Juan Carlos.
“Cuando llegamos a la Fiscalía nos comunican que a mi hermano lo tenía un Juzgado Penal Militar de la Novena Brigada, allí no querían entregarnos el cuerpo según porque había sido dado de baja en combate; y es que en el informe hecho por el Ejército, me lo hicieron pasar como integrante de la guerrilla de las Farc, con el alias de ‘El Cura’ ”, detalló Mauricio, hermano de Juan Carlos Aguirre Macías.
La incertidumbre culminó el tres de julio de 2012 cuando la Fiscalía General de la Nación les entregó los restos en el cementerio central de Neiva, los cuales fueron enterrados en la bóveda 764, donde su familia pudo despedirse de él.
Desafortunadamente, para el 2017 cuando Mauricio volvió al cementerio, notó la ausencia del cuerpo, donde según lo que relata “el cementerio sacó los restos de mi hermano de la bóveda donde estaba, al parecer por el supuesto vencimiento del contrato de arrendamiento. Nunca supimos dónde quedó.”, agregó Mauricio Aguirre.
En ese momento inició su segunda búsqueda, donde para el 2019 fueron acreditados como víctima en el Caso 03 de la JEP, que investiga asesinatos y desapariciones forzadas presentadas como bajas en combate por agentes del Estado. En ese proceso de búsqueda recibieron acompañamiento jurídico y psicosocial del Observatorio Surcolombiano de Derechos Humanos, Paz y Territorio (Obsurdh).
Ante las solicitudes de familiares de víctimas de desaparición forzada en Huila, en 2021, la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad de la JEP adoptó una medida cautelar para proteger puntos de interés forense en el cementerio, protección que consistió en restringir y limitar el uso y acceso a esas áreas.
De esta manera, la JEP le solicitó a la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas avanzar en la recuperación de los cuerpos que se encontraban en riesgo, donde entre los cuerpos por encontrar e identificar estaba el de Juan Carlos Aguirre, recuperado en una jornada de febrero de 2024, junto a 13 cuerpos más.
“Mi hermano no era un guerrillero, él era un trabajador. Viajaba cada que podía a Bogotá para comprar monturas de gafas y venderlas aquí en Neiva para responder por sus cuatro hijos, cuidaba mi mamá, era una muy buena persona”, indicó Mauricio.
Solo en Huila se han reportan cerca de 1.200 personas desaparecidas en el marco del conflicto armado, personas que sus familias aún siguen buscando sin descanso.
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— RCN Radio Neiva (@RCN1150Neiva) June 6, 2024
“Ahora esperamos la aclaración por parte del militar que me lo asesinó, vamos a tener las audiencias en agosto, en la cual él me tiene que decir toda la verdad, porque no lo ha hecho, y una de las cosas que quiero escuchar de parte de él es que antes del asesinármelo, él me lo maltrató, me lo golpeó. Yo tengo las fotos que el ejército colombiano hizo en el levantamiento del cadáver de mi hermano”, enfatizó Mauricio Aguirre.
Finalmente, la mamá de Juan Carlos Aguirre Macías, a quienes las familias buscadoras llaman ‘mamá adoptiva’, expresó su agradecimiento y sobre todo lo que significaba para ella y sus seres queridos la ceremonia simbólica donde le entregaron los restos y por su puesto el descanso que podría tener, luego de tantos años, tanto ella como su hijo.
“Es un descanso inmenso, desde que vi sus dientes, sentí un descanso inmenso. Por eso he tenido fuerzas para soportar porque desde que supe que era él, mi Dios me dio fuerzas para seguir hasta aquí, hasta donde estoy, por esa razón les pido a las demás familias, busquen a sus seres queridos desesperadamente, yo andaba como loca buscándolo”, expresó Gladys, mamá de Juan Carlos Aguirre Macías.
Gladys Aguirre, durante la desaparición de su hijo, lo estuvo buscando debajo de puentes, de tierra, nunca descansó hasta este día, en el que luego de una larga lucha, pudieron darle una última despedida, la cual esperan se la última, ya que quedará en el ‘Monumento 17’ en un osario a perpetuidad, certificado por la Alcaldía municipal
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