En menos de dos días el número de personas fallecidas se disparó en el Tolima, crecientes de ríos, accidentes de tránsito, casos de intolerancia y un posible sicariato fueron las causas que desencadenaron los finales fatales de personas entre los tres y los 55 años.
Es menester iniciar con la tragedia que enlutó a la capital del Tolima en la madrugada del sábado 22 cuando las fuertes lluvias provocaron un alud de tierra en la vereda Los Naranjos y la creciente súbita del río Berbellón en el corregimiento de Tapias.
Producto del deslizamiento de tierra una familia quedó atrapada dentro del fango y las rocas, estando desaparecida por varias horas hasta que la comunidad, unidades de la Defensa Civil y de los bomberos lograron ubicar los cadáveres de la señora Marleny Triviño García, de 79 años, y su nieto Johan Mauricio Pinzón, de 14.
Lamentablemente las fatalidades no terminaron allí ese día, puesto que kilómetros más abajo, una familia vivía su propio infierno luego que, buscando huir de los deslizamientos que amenazaban con llevarse su casa, la creciente súbita del río Berbellón arrancara de los brazos de su madre a María Alejandra Aguiler, una menor de tres añitos.
La tristeza embargó a todos los ibaguereños luego que las autoridades confirmaran el hallazgo de la pequeña María Alejandra en la orilla del afluente hídrico sobre el sector de Ortega.
El domingo 23, en horas de la tarde, en la vía Ibagué – Cajamarca, cerca al corregimiento de Coello, un vehículo de carga pesada arrolló a un adolescente de 15 años, quien fue trasladado hasta la Clínica Tolima, donde lamentablemente perdió la vida.
Todo parecería indicar que el conductor del tractocamión huyó del lugar de los hechos, sin embargo, también es probable que la persona detrás del volante no se haya percatado de lo sucedido.
Continuando con los accidentes de tránsito, ayer se presentó una colisión entre dos motocicletas en el kilómetro 19 + 700 metros de la vía Chaparral – Ortega, allí José Alonso García Morales, de 55 años y Cristóbal Alcides García Morales, de 34, tío y sobrino respectivamente, perdieron la vida después del choque, al parecer se movilizaban con exceso de velocidad.
Volviendo a Ibagué, en un caso de intolerancia fue asesinado Diego Armando Larga, de 28 años, quien se inmiscuyó en una discusión con varios amigos con quienes estaban bebiendo licor sobre la vía pública del barro Gaitán, al parecer, producto de una discusión por un trago de alcohol Diego Armando y un sujeto identificado como ‘El Costeño’ y empezaron a cruzar palabras de alto calibre, sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos ‘El Costeño’ le propinó una certera puñalada en el pecho al hoy occiso.
Por último, en la vereda Los Pinos de Anzoátegui fue ultimado por hombres a bordo de motocicletas, Luis Alfredo Enciso Arango, de 55 años de edad, al parecer este hecho se trató de un caso de sicariato.