Hace algunos días, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, se reunió con los ponentes de todos los partidos políticos para concertar el texto de la reforma tributaria que se presentará para último debate en las plenarias de Senado y Cámara.
A pesar de que se está tratando de llegar a consensos con todos los partidos, algunos congresistas, especialmente de oposición siguen alertando sobre los impactos negativos que tendría la Reforma Tributaria en el bolsillo de los colombianos en general, sin importar su estrato social.
En ese sentido, el Centro Democrático replicó esta semana la preocupación que expresó la Asociación Nacional de Fabricantes de Pan (Adepan). Este gremio aseguró que de aprobarse la Reforma Tributaria del Gobierno Petro tal y como está, un producto tan común como el pan, subiría de precio.
La presidenta de Adepan, Marcela Morales, explicó que en un primer debate se incluyó, debido a la partida arancelaria qué incluye los impuestos de panificación, el impuesto saludable también para el pan, lo cual significa un aumento del 10 % para el 2023, un 15 % para el 2024 y ya para el 2025 estaría sobre un impuesto adicional del 20 %.
Según Morales esto pondría no solamente por encargué tributario que va a tener este producto, entre muchos otros que se realicen en las panaderías en Colombia, si no la invitación que va a tener para los ciudadanos que tienen como opción primaria este tipo de alimentos, principalmente para los desayunos.
"Estos productos ya por contener azúcar sí estarían grabados con esta condición, con ese 10 %, 15 % y 20 %; lo que ya lleve un azúcar adicionado si sería incluida dentro de la reforma como un alimento ultra procesado”, dijo Morales en entrevista con una cadena radial.
Tenderos también están preocupados
Algunos tenderos del país le han pedido al Gobierno que revise los 'impuestos saludables' incluidos dentro del proyecto de reforma tributaria.
Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, indicó que "ellos saben (comerciantes) que esto representa los principales excedentes de sus ventas, en un momento en el que no se ha podido recuperar el 60 % de los negocios de la pandemia. Es decir que tienen ventas inferiores a las que tenían en el 2019 y estos impuestos los pueden llevar a que se deprima la demanda y la compra de sus clientes, poniendo en duda la continuación de sus tiendas".
De acuerdo con el gremio, este tipo de alimentos significan el 70 % de las ventas de las tiendas del país y el 90 % de sus ventas están en estratos 1,2 y 3.
"El impacto que tiene esto en los hogares vulnerables con cualquier incremento de precio puede llevarlos a no consumir y por supuesto poner en riesgo la viabilidad de tiendas. O si consumen, encarecerse con un impacto inflacionario en la cadena productiva", aseguró el dirigente gremial.